CON JAVIER CANCHO

Historia de la ciudad de los dioses

Los antiguos aztecas descubrieron una ciudad abandonada.

Javier Cancho

Madrid | 09.01.2020 11:37

Era un lugar tan colosal que tuvieron la convicción de que un sitio como ese sólo podía haber sido construido por gigantes. Pensaron que fue allí donde se habían reunido los dioses para crear la existencia del mundo. El hallazgo de aquella antigua urbe se hizo antes de que Colón llegase a América. Y aquella historia fue configurando el mito, el mito de la ciudad perdida, propagándose después como leyenda.

La leyenda estaba en el aire del tiempo en el que los españoles conquistaron México. Se sabe que hace 500 años, el 7 de julio de 1520, Hernán Cortés y sus soldados pasaron entre las ruinas de Teotihuacán, pasaron por allí sin saber que allí es donde permanecía oculta la ciudad de los dioses. Hernán Cortes transitó por allí fijándose en aquellas colinas que flanqueban su camino, sin saber que -en realidad- aquellos montículos contenían en su interior pirámides enterradas por el paso del tiempo. Sin saberlo, Hernán Cortés pasó por la gran avenida de la ciudad ancestral, la más poblada que existió en todo el Continente Americano de la época prehispánica.

Bajo aquellas dos montañas estaban las pirámides del sol y de la luna. Teotihuacán se levantó en el altiplano central mexicano, a unos 2300 metros de altura. La ciudad de los dioses fue habitada hasta el 650 después de Cristo. Fue habitada durante siete centurias. Conviviendo, allí, una civilización extraordinaria que logró un fabuloso esplendor monumental, que continúa siendo motivo de asombro con cada descubrimiento que se hace en las entrañas de un lugar que fue sagrado. Bajo las pirámides existe una red laberíntica de túneles y cuevas. Allí se celebraban ritos funerarios y de propiciación de la fertilidad. Vida y muerte eran invocadas. Teotihuacán fue un lugar de veneración tanto de la naturaleza como del universo.

El ocaso de la ciudad de los dioses llegó entre el siglo séptimo y el octavo. Hubo un gran incendio. Un fuego desbastador que aniquiló casi todo. Se sospecha que el incendio pudiera ser causado por una revuelta interna, tras una convivencia multiétnica modélica durante duró siglos. Tras el gran incendio, la ciudad de los dioses fue saqueada.

Siguen faltando piezas del puzzle para entender una civilización tan civilizada a la que se atribuye la fundación de la ciudad de los dioses. Se infieren hipótesis sobre lo que allí hubo, pero faltan todas las evidencias. Se están haciendo indagaciones arqueológicas en túneles que estuvieron sellados cerca de 2000 años.

Aquella civilización pensaba que el cosmos se dividía en tres regiones: el cielo, la tierra y el inframundo. El inframundo como paraje subterráneo, oscuro, frío, húmedo. Pero no era sólo el lugar de la muerte: también era el lugar de la creación, de donde todo surge. Se han encontrado restos sorprendentes como grandes conchas y caracoles que hace casi dos milenios alguien trajo desde el mar Caribe, a más de 1.000 Kms de distancia. Se hallaron cerca de la pirámide de la Serpiente Emplumada. Interpretaciones recientes sugieren que aquel edificio se vinculaba a la creación del tiempo, a su medición en un calendario. Pero también se cree que la serpiente emplumada fue la patrona de los gobernantes. Porque es muy probable que la mujer fuera el género más influyente de aquella civilización.