El Barça en Londres, se llevó por delante al Tottenham desde el primer minuto, y antes de la media hora ya ganaba por dos goles, con Coutinho bajando a ayudar y subiendo a rematar, y las dos cosas las hizo muy bien.
Reconozco que dudé de si merecía la pena el esfuerzo que hizo el Barça para ficharlo del Liverpool, pero cada día Coutinho me parece mejor y más importante para el Barça. Se atrevió el Tottenham a encararse con el Barça, y le puso en dificultades en algunos momentos, pero no tuvo ni un despiste defensivo. Victoria del Barça, y pasó la nube negra para Valverde, al que ya se le había empezado a señalar y a discutir su continuidad.
También ha pasado la nube contra Simeone, aunque a Simeone no se atreven tantos a discutirle abiertamente, más bien le refunfuñan su supuesta racanería defensiva cuando el Atleti pierde o empata, cuando el equipo gana y Griezmann marca goles como el de anoche nadie se atreve a refunfuñar nada.
Fue una noche agradable de fútbol, con emoción y goles espectaculares como el de Rakitic, o sin apenas ángulo como el de Groeneveld para el Brujas. Pero veníamos de una tarde en la que Neymar volvió a bajar de los cielos y se apareció a sus apóstoles del PSG y marcó tres goles, dos de ellos de lanzamientos telescópicos de falta, que ponen muy derecho al PSG para esta Champions que tanto ha buscado y nunca llegó ni a semifinales.
Este año creo que con la que experiencia que ha cogido y los jugadores que tiene, que tampoco se van a desgastar mucho en la liga francesa, el PSG puede ser uno de los finalistas. Al tiempo.