El fútbol de la Champions nos invita esta noche al calorcillo de la televisión de casa con dos partidos descafeinados porque el Sevilla no se juega nada en Rennes con los franceses. Haga lo que haga, será segundo y está clasificado.
Y el Barça, si no pierde por más de dos goles en el Camp Nou esta noche contra la Juventus, también es primero de grupo, pero tiene el aliciente de ver enfrentarse de nuevo a Cristiano y Messi, algo que no sucedía desde hace dos años.
Será mañana cuando la noche televisiva tenga más dramatismo porque el Real Madrid y el Atlético se lo juegan todo en sus dos partidos. El Real Madrid, en su campo frente a los alemanes del Monchengladbach, y el Atlético en Austria contra el Salzburgo con el que necesitará empatar.
Es curioso que el Atlético ande con esas apreturas en la Champions con la trayectoria que lleva en LaLiga española donde tan sólo ha encajado dos goles.
No parece mejorar mucho el Valencia, que anoche empató a 0 ante el Eibar y es que el Valencia, desde la marcha de Marcelino como entrenador, ha ido perdiendo distancia con los equipos grandes, que son los que se están disputando los puestos de la Champions.
Anoche, Marcelino estuvo en El Transistor y me confesó que su ilusión es entrenar en el extranjero. No es que descarte hacerlo en España, sino que es como si aquí hubiera tocado techo y prefiriese probar en Inglaterra o Italia, para lo que se ha estado preparando durante los últimos meses.
No quería olvidarme esta mañana de las chicas de la Selección de Balonmano, que remontaron un partido que iba perdiendo con la República Checa en el Europeo Femenino. Son 'las guerreras', nuestras guerras de balonmano que vuelven a ilusionarnos.