Alquilar una casa no siempre es buena idea, Josemi lo sabe mejor que nadie, nos cuenta lo que hacían algunos de sus inquilinos. Uno de ellos era un juez y a falta de agenda apuntaba los números de teléfono en las paredes de la casa.
Después del verano le toca buscar remedio para reformar sus pisos y apartamentos, "un trabajo muy duro me voy a volver loco". Aunque asegura que "no servirá de nada porque llegará el hijo de la que alquile el piso y me dibujará todas las paredes".
Además explica que cuando va de viaje no lleva maletas, lleva varias bolsas, una para los zapatos, otra para los cinturones y así con todas sus cosas. El motivo es "por si a última hora me tengo que montar en un descapotable donde no entran bien las maletas".