LA PRIMERA DE LA MAÑANA

Marta García Aller: "Eso del mecanismo de solidaridad intergeneracional, es una trampa monumental"

Marta García Aller reflexiona en 'Más de uno' sobre la brecha económica entre los jóvenes y mayores en España, pues la riqueza neta de los menores de 45 años está en mínimos históricos.

Marta García Aller

Madrid | 15.05.2024 07:30

Si no les faltaban motivos a los más jóvenes para estar hartos de que les digan que a su generación se lo han dado todo hecho, que no saben lo que es el esfuerzo y que ya es hora de que dejen de quejarse y se pongan a trabajar, aquí va otro motivo. Otro motivo para estar hartos y quejarse un poco más:

La riqueza neta de los menores de 45 años está en mínimos históricos y la de mayores de 75 en máximos. Hay tres razones fundamentales que alimentan que esta desigualdad vaya en aumento. Y ninguna tiene que ver con el esfuerzo.

Las pensiones están blindadas contra la inflación, por lo que la renta de los jubilados ha crecido mucho, mientras la mayoría de los trabajadores la pierden. Además, los empleos de los jóvenes son cada vez más precarios. Y los mayores pertenecen a la generación que más vivienda tiene en propiedad.

Son los caseros de los menores de 45, que se dejan cada vez más porcentaje de su sueldo en alquiler. Los caseros son cada vez más mayores y más ricos y los inquilinos más jóvenes y más pobres. Los jubilados además de los sueldos blindados tienen a su favor la subida desmesurada de los precios de la vivienda de los últimos años. También muchas subvenciones de las políticas públicas que las edades intermedias no tienen.

Según esta radiografía del Banco de España de la riqueza (y la pobreza) de los hogares españoles, la riqueza neta de los mayores de 75 aumentó un 50% entre 2017 y 2022. Su riqueza es casi el triple de la que tienen los hogares entre 35 y 44 años. Nunca se había producido una brecha generacional tan grande.

Así que a lo mejor no es que los jóvenes no sepan lo que es la cultura del esfuerzo, es que tienen pocos indicios de que a su generación les vaya a funcionar al ver cómo le va a los millennials, que, por cierto, ya pasan de los 40.

¿Moraleja?

Eso del mecanismo de solidaridad intergeneracional, es una trampa monumental.