El que mejor resumió la comparecencia de ayer de Carlos Mazón fue Santiago Abascal: “es lo que hubiéramos dicho nosotros”, celebró el líder del Vox. Eso fue lo que dijo Génova también, que suscribía todas las palabras de Mazón. O sea, que Mazón está de acuerdo en todo con Abascal. Y Génova, a su vez, con Mazón.
Pues aclarado el malentendido entonces. Porque hace apenas dos semanas andaba Feijóo tratando de diferenciar el PP de Vox. Ahora resulta que no hace falta, que están súper de acuerdo. Ni un remilgo, oye, con tal de lograr su apoyo a los Presupuestos en la Comunidad Valenciana.
Hace unos días, para distanciarse de Vox, Feijóo decía que había que “volver a la centralidad”. Y criticaba a Vox por rendirle pleitesía a Trump diciéndole a todo que sí. Ahora Feijóo acepta lo que dice Mazón sin rechistar y es Mazón el que dice a Abascal a todo que sí. El silogismo se hace solo.
Hablar de “dogmatismo climático” para referirse al pacto verde de Von der Layen ya no son las palabras de Vox, sino las de Mazón, es decir, las que el PP ve consecuentes. Igual que las que vinculan sin tapujos inmigración a delincuencia.
Mazón reclamaba ayer que se haga pública la nacionalidad de los detenidos el día de la riada. ¿Sabe donde había muchos inmigrantes el día de la dana, president? ¿Sabe dónde había marroquíes, rumanos, tunecinos y colombianos el día de la trágica riada? Entre las víctimas. Hubo fallecidos de 12 nacionalidades. No oculte ese dato tampoco.
El PP dice que las palabras de Mazón son consecuentes con su forma de pensar. ¿Cuál de ellas? ¿La de la centralidad o la otra? ¿La que considera a Vox “el seguro de vida del sanchismo” o la que coincide con sus postulados más radicales antiinmigración y anti-pacto verde europeo? Se está esforzando tanto el PP en ocultar su incomodidad con el pacto de Mazón que cada vez cuesta más encontrar sus principios.
¿Moraleja?
Si estás de acuerdo con Vox en su totalidad, no me vengas luego hablando de centralidad
