LA PRIMERA DE LA MAÑANA

Marta García Aller: "La eutanasia es un derecho y no una obligación"

Marta García Aller reflexiona sobre la decisión del Tribunal Constitucional de avalar de nuevo la ley de Eutanasia.

Marta García Aller

Madrid | 14.09.2023 07:43

Ahora que hablamos tanto de lo que cabe y lo que no en la Constitución, escuchemos al Constitucional porque ha hablado otra vez. Y van dos. Van dos veces que Constitucional avala la ley de Eutanasia. Primero tumbó el recurso de Vox y acaba de tumbar el del PP. La ley lleva en vigor desde que el gobierno de coalición la aprobase en junio de 2021. Y en vigor seguirá, porque el Tribunal avala otra vez la constitucionalidad del derecho a morir dignamente en España.

Las personas que elijan morir, las que decidan dejar de vivir con un sufrimiento insoportable, podrán seguir haciéndolo. La eutanasia es constitucional. Por qué no iba a serlo si el sufrimiento extremo afecta al derecho a la integridad personal y la dignidad humana. El Tribunal ya avaló hace unos meses que sea una decisión individual, libre y consciente. Ahora desmiente por segunda vez que morir dignamente atente contra el derecho a la vida y aclara el derecho a la objeción de conciencia.

Más de un 70% de españoles, ya estaba de acuerdo con esta ley cuando se aprobó. La opinión pública había entendido mucho antes que los partidos que votaron en contra de esta ley que el derecho a la vida no se opone a la muerte digna. La Constitución no impone la obligación de mantenerse con vida. Y la prestación de ayuda para morir encuentra su base en los valores, principios y derechos fundamentales consagrados en la Constitución.

Son valores y principios muy constitucionales, los vinculados a la libertad y dignidad personal, a un derecho fundamental como es el de la integridad física y moral.

A lo mejor hay que insistir, pasa también con el derecho al aborto, que la eutanasia es un derecho y no una obligación. Es voluntaria. Ni la eutanasia te obliga a morir ni el aborto a abortar ni el divorcio a divorciarte. Tampoco el matrimonio igualitario obliga a nadie a casarse con personas del mismo sexo. Es una cuestión de libertad. La libertad de elegir sobre la vida de uno.

¿Moraleja?

Los partidos que presuman de constitucionales, ya pueden sumar la eutanasia al orgullo de los derechos nacionales.