En tres cosas se parecen el PSOE de Madrid y el Partido Republicano de los Estados Unidos.
- ¿La primera? Que ninguno de los dos tiene todavía candidato.
- ¿La segunda? Que ambos anuncian novedades para esta misma semana o, como muy tarde, la que viene.
- ¿La tercera? Que tanto en el Partido Republicano como en el PSOE de Madrid el candidato es elegido en primarias. Se postula el que quiere, hay una competición y gana el que más votos saca. Igual por eso está resultando tan chocante la forma en que el PSOE madrileño está gestionando lo de su candidato a alcalde. Dicen las crónicas: sólo lo saben tres personas. No han hecho falta más porque fue proponérselo y aceptar de inmediato. Pero vamos a ver, un partido que hasta ayer presumía de haber dado voz a la militancia, de haber incrementado la democracia interna, de dejar en manos de los afiliados la elección de los candidatos… y ahora presume de que al candidato lo han escogido entre tres. Bueno, entre dos porque el tercero es el candidato mismo. Oiga, qué procesos tan raros. A ver si Sánchez va a tener una libreta azul. Como Aznar.
En qué estado de salud se encuentra la presidencia de Joe Biden
En los Estados Unidos -ya les prevengo- hay elecciones al Congreso y el Senado mañana. Y el nombre del que más estaremos hablando el miércoles es el de Donald Trump. Que a estas no se presenta. Éstas son elecciones para elegir el Congreso de allí, los diputados -allí sólo duran dos años- y un tercio de los senadores -que duran seis años y se renuevan por terceras partes-.
Pero el resultado de mañanapermitirá medir cómo va el pulso entre republicanos y demócratas y en qué estado de salud se encuentra la presidencia de Joe Biden. Y si estaremos hablando el miércoles de Trump es porque la prensa estadounidense da por hecho que un avance de los conservadores mañana daría alas a la candidatura de Trump a la presidencia -otra vez-, porque él mismo se adjudicaría el mérito de la campaña electoral en la que estos días se ha volcado.
Como el Partido Republicano, a diferencia del PSOE de Madrid, sí tiene unas primarias de verdad, lo más que puede anunciar Trump esta semana es que va a ser pre candidato
Trump, no es un secreto, tiene ganas de revancha. Pero como el Partido Republicano, a diferencia del PSOE de Madrid, sí tiene unas primarias de verdad, lo más que puede anunciar esta semana, o la próxima, es que va a ser pre candidato. Porque hay más gallos en ese corral queriendo medirse a Biden en 2024. El principal, un tal Ronald de Santis que tiene 44 años y se desempeña como gobernador de Florida.
A la cumbre del clima siguen sin acudir el chino, el incio ni el ruso
Seguro que usted se acuerda de que una de las cosas que primero anunció Biden cuando llegó a la Casa Blanca fue el regreso de los Estados Unidos al Acuerdo de París sobre el cambio climático. Por eso viaja Biden a Sharm el Seij, en Egipto. A la cumbre del clima de este año, a la que sigue sin acudir el emperador chino Xi -25% de las emisiones del planeta-, el primer ministro indio Modi -7%- y el caudillo ruso Putin -4,5%-.
Siete años después del Acuerdo de París para evitar que la temperatura global llegue a estar dos grados por encima de la época anterior a la revolución industrial, la ONU ha hecho saber que estamos en el 1,15 y que se siguen batiendo récords cada año de gases contaminantes. Los últimos ocho años han sido los más cálidos de la historia de la humanidad.
No va Greta pero sí va Sánchez, en el medio de transporte más sostebible que conoce, que es... el Falcon
A la cumbre de este año no va Greta porque dice que los gobiernos la usan para blanquearse. Y porque en Egipto no se respetan los derechos humanos. No va Greta pero sí va Sánchez, en el medio de transporte más sostebible que conoce, que es... el Falcon.
Podemos empieza a estar harto de Yolanda Díaz
El partido Podemos se ha dado cuenta de que Yolanda Díaz lo ningunea. Puede que haya sido el último en darse cuenta, pero ha querido que se sepa que empieza a estar harto.
El partido Podemos organiza una cosa que llama ‘Uni de otoño’, ‘uni’ por ‘universidad’ y ‘otoño’ por… ‘otoño’, eso es. Convocan a gentes de izquierdas, mayoritariamente de su cuerda, y comentan todo lo que aún les queda por hacer y el mérito que tiene todo lo que Podemos ya ha hecho, perseguido, como está, por el poder y por el sistema aun formando parte, desde hace ya tres años, del Gobierno de España, que algo de sistema sí que tiene.
El partido Podemos no tiene en sus filas a Yolanda Díaz, aunque una vez decidió, porque así lo quiso Iglesias, que ella debía ser la candidata a la presidencia del Gobierno (sin preguntarle, por cierto, a ella y sin esperar a que fuera ella quien dijera, como mujer libre que es, qué diablos quiere hacer con su vida). Desde entonces ella ejerce como tal, como futura candidata, al tiempo que niega que haya decidido ya serlo. Y desde entonces viene predicando su alejamiento de los partidos políticos, que ve como una fórmula del pasado, y su deseo de huir de las marcas y las siglas. O traducido: su determinación de huir de Pablo Iglesias.
Yolanda Díaz viene predicando su determinación de huir de Pablo Iglesias
En el último acto de su ‘Uni de otoño’ el papa emérito de Podemos se dirigió a la Yolanda ausente para reconvenirla. Porque para eso está él, para hacerle ver lo mucho que se está equivocando. Le hizo una observación, una advertencia y un exhorto. Por su nombre no la mencionó. Aún no ha llegado el momento. Pero hubo quien estando allí, interpretó que se refería a Yolanda cuando dijo lo de los partidos.
Reaccionario, primer adjetivo. Ésta fue la observación: los partidos no son el pasado. Sin partido no se llega al Gobierno. Hay quien piensa que Iglesias pensaba en Yolanda cuando dijo que hay gente que desea que a Podemos le vaya mal en las elecciones municipales para quedarse con todo el espacio de la nueva izquierda.
Le faltó llamarla la izquierdita cobarde
Eso es, le faltó llamarla la izquierdita cobarde. Frente al coraje de Podemos, siempre en primera línea, la complicidad de esta otra izquierda con el sistema (y con la progresía mediática): esto igual iba también por Errejón, ¿verdad?, la herida todavía supura. Si Podemos se estrella en las municipales, la otra izquierda emergerá sobre sus cenizas. Aquí llegó la advertencia.
Estúpido. Ingenuo. Segundo y tercer adjetivo. Siempre en masculino, para que no parezca. Sin partido no se alcanza el Gobierno. Sin un buen resultado de Podemos en las municipales, no habrá buen resultado de la izquierda en las generales, candidata. Y por último, el exhorto. Del emérito a la pupila díscola, tú que me debes tanto.
Frente al coraje de Podemos, siempre en primera línea, la complicidad de esta otra izquierda con el sistema
Que nos respetes, Yolanda. El viernes comentamos aquí que no se la ve a Yolanda Díaz dejándose la piel, como ella misma diría, por las causas que Podemos considera estos días irrenunciables: la ley trans, la ley de vivienda, la investigación sobre Nador, Vicky Rosell para el Consejo del Poder Judicial, las cloacas. Hace declaraciones de trámite y no ha dado ni media batalla. Ella está a otras cosas: el salario mínimo, el estatuto del trabajador, la indemnización por despido según edad y sexo.
Yolanda, la blanda. La que no incomoda
El laborismo, que diría Iván Redondo. Al que hace tiempo que no le leo ese salmo que decía que Díaz puede ser la primera presidenta del Gobierno de España. Ahora ya la pregunta es si tiene alguna opción de serlo no ya sin Podemos, sino con Podemos haciéndole la campaña en contra.
Yolanda, la blanda. La que no incomoda. La que gusta al sistema. La cera que no arde. La izquierdita cobarde.