Estuvo ayer cicatero el presidente. Rácano. No en el elogio de su gestión, que en eso siempre va sobrao. Estuvo cicatero en el reconocimiento al trabajo de los gobiernos autonómicos. Y de la comisión europea.
"Las homilías vacuníferas"
Que Sánchez regrese, como hizo ayer, a las homilías ---las homilías vacuníferas--- seguramente tiene alguna explicación. Una explicación táctica, como todo lo que se decide en la oficina de campaña 24/7 (veinticuatro horas, siete días a la semana) que es el Palacio de la Moncloa. Quizá ha creído oportuno el líder del PSOE madrileño recordarnos a todos que sigue siendo el presidente del gobierno, no vayamos a acabar pensando, de tanto verle mitinear contra Ayuso, que ha hecho lo mismo que Iglesias, pasar del gobierno de España para intentar gobernar de una vez su región más esquiva.
Ayer Sánchez nos quiso recordar que sigue siendo el presidente del gobierno apareciéndose como el comandante en jefe de las vacunas
Sánchez, en efecto, es presidente. Y ayer nos lo quiso recordar apareciéndose como el comandante en jefe de las vacunas. Hace tiempo que la incidencia de contagios –--ese indicador tan incómodo--- dato es una cosa autonómica, ¿verdad?, hace tiempo que las hospitalizaciones, las UCIs, los fallecidos son un asunto territorial, qué va a tener que decir el presidente sobre todo eso, mientras que la vacunación ---ahí sí--- es campo abonado para explayarse. De vacunas sí quiere hablar el presidente. Y por eso ayer nos sirvió un plato recalentado, con las mismas expectativas que ya había formulado hace meses pero añadiendo ---única novedad de ayer--- metas volantes semanales. Que para la primera de mayo cinco millones de vacunados, que para junio diez millones, que para fin de agosto los 33 prometidos. Se explayó explicando el orden establecido para vacunarnos por grupos de riesgo y de edad, nada nuevo que no hubieran decidido y anunciado ya los gobiernos autonómicos en el Consejo Interterritorial.
Y aquí es donde estuvo cicatero el presidente. Del papel de los gobiernos autonómicos habló cinco segundos.Cuando son los gobiernos autonómicos los que nos están vacunando porque suyos son los servicios de salud.
Bien está que se saque pecho por lo mucho que es capaz de vacunar la sanidad española gracias a sus recursos y su experiencia, pero en esto los recursos, la experiencia y, por tanto, el mérito es de quien gestiona eso. No le costaba nada a Sánchez haberlo subrayado. No le costaba nada haber atribuido a la señora Von der Layen, presidenta de la comisión europea, el mérito de poder hacer esto que Sánchez llamó un anuncio: "Tenemos contratadas 87 millones de dosis".
"Tenemos contratadas" significa que la comisión europea tiene contratadas. Con las farmacéuticas. Quien abronca a las compañías y las llama al orden cuando incumplen el calendario de entregas es... la señora Von der Layen. Las vacunas las compra la comisión, que se las hace llegar a los gobiernos nacionales. El nuestro recoge los envíos y se los entrega en mano a los gobiernos autonómicos. Hasta ahí llega su papel y su mérito. En esto de la vacunación el gobierno es el repartidor de Amazon. Transporte y entrega sin que el producto se deteriore. Todo lo demás es mérito de otros. Que deben de estar pensando que políticamente lo rentabilizan poco.
"Ayuso congrega en torno a sí el voto antigobierno"
Ahí está la señora Ayuso, confirmando que ha estado pidiendo precio ya a los rusos. Dices: pero si la Sputnik no la ha autorizado Bruselas. Bueno, por si alguna vez la autoriza. Para tener la gestión ya hecha. De esto se trata. De seguir rentabilizando la competición con el gobierno central, la oposición como reclamo electoral madrileño. Con razón sostiene Antonio Caño que Ayuso lo que congrega en torno a sí es el voto antigobierno.
Pero bueno, ahí tiene usted también a Ximo Puig, que no anda en tratos con los rusos pero sí anda en fotos con los de la Janssen. No porque va a comprarles vacunas por su cuenta, pero para que un poco sí lo parezca. Los de la Janssen a quien tienen que asegurar que cumplirán con las entregas contratadas es a quien les firmó el contrato, que es... la comisión europea.
Vínculo entre los casos de trombosis y la vacuna de AstraZeneca
Vamos a ver qué dice hoy la Agencia Europea del Medicamento sobre el último episodio del serial AstraZéneca. El italiano Cavaleri, responsable de vacunas de la Agencia, sorprendió ayer al personal declarando al Messagero que ahora sí puede afirmarse que existe un vínculo entre los casos de trombosis cerebrales y la vacuna. Un vínculo significa que no habría habido trombos de no haberse recibido la vacuna. Pero que aún no han dado con la clave del porqué a unas pocas personas les sucede esto y a la abrumadora mayoría no les pasa nada, salvo que se inmunizan.
De lo que contó ayer este ciudadano se desprende que la Agencia Europea va a revisar su criterio y va a desaconsejar el uso de esta vacuna en algunos tramos de edad. Hoy lo veremos. No ayudan los vaivenes en este asunto a desterrar el recelo sobre el producto astrazénico.
Fin del estado de alarma
Y a todo esto, el presidente va dando por amortizado ya el estado de alarma y anuncia que no se propone prorrogarlo. En ausencia de alarma se acabarán los confinamientos perimetrales autonómicos: lo de no poder salir de una región, que fue la justificación que se dio en octubre (el paraguas jurídico que requerían los presidentes autonómicos) para decretar y prorrogar seis meses y medio la muy excepcional situación que permite limitar nuestros derechos fundamentales.