Cuando voy y escucho a políticos, suele encogerse mi alma;
Con Rodríguez Zapatero recordé a Hayek, pero no a Salma.
Triunfan los peores, dijo este en Camino de servidumbre,
Quiso engañarte aquél, pero no caíste en su herrumbre.
Cayó el ataque al hospital de Gaza, lo hablaste con Irene Huertas;
Se lanzaron acusaciones contra Israel, que no eran ciertas.
Cierta fue la alegría de Sonsoles Ónega por su Planeta,
Tarda tres años en escribir cada novela, y no para quieta;
Como el finalista, el jovencísimo Alfonso Goizueta.
Aún más jóvenes hay en Chinas, en busca de identidad,
Exhevarría y Xinyi Ye las comprenden en su intimidad.
Intimaste con El infierno, la novela de Carmen Mola;
Como son tres autores, y los bufos, ella nunca está sola.
