Rubén Amón indulta a José Mourinho, porque tiene en el museo del Chelsea "una vitrina donde se alojan las reliquias del míster como si fuera el equipaje de un santo". Asegura Amón que "Mourinho no tiene seguidores sino militantes" que "lo adoran como al líder de una secta, se inmolarían con él y se identifican con él asumiendo como propias las teorías conspiratorias", y destaca que para el entrenador del Chelsea, "las victorias siempre han sido un mérito personal, mientras que las derrotas siempre han obedecido a factores ajenos".
El indultado: José Mourinho
Rubén Amón indulta a José Mourinho, porque tiene en el museo del Chelsea "una vitrina donde se alojan las reliquias del míster como si fuera el equipaje de un santo". Asegura Amón que "Mourinho no tiene seguidores sino militantes" que "lo adoran como al líder de una secta, se inmolarían con él y se identifican con él asumiendo como propias las teorías conspiratorias", y destaca que para el entrenador del Chelsea, "las victorias siempre han sido un mérito personal, mientras que las derrotas siempre han obedecido a factores ajenos".