Rubén Amón indulta al catalán soberanista: "No tengo soluciones para ti si crees que el referendum del 1 de octubre es realmente un referendum"

Querido amigo soberanista. Me dirijo a ti para rescatarte del secuestro emocional y religioso en que te encuentras. No puedo hacer nada para salvarte si piensas que los turistas son los caminantes blancos.

O si crees que Madrid te roba. O si piensas que Rajoy es la reencarnación de Belcebú. Seamos serios. No sería entonces tan convencional, ¿no?

No tengo soluciones para tu caso, por ejemplo, si crees que el referendum del 1 de octubre es realmente un referendum. Y olvídate de la Constitución. ¿Quieres que el sueño legítimo de la independencia debe conseguirse con un atajo y que debe amañarse el plebiscito, convocarlo sin censo, quorum, observadores, interventores?

El soberanismo es una idea defendible, ¿pero la utopía de la patria nueva, del edén, del paraíso prometido, ha de conseguirse de verdad ultrajando la democracia misma, profanando el parlamento, pervirtiendo la propaganda, vulnerando la separación de poderes, intimidando la oposición?

Digo oposición no como si fuera una minoría inerte. Te recuerdo, amigo soberanista, que representa a más del 52% del sufragio. Y amigo soberanista, permíteme añadir que aquí no se está produciendo una desconexión entre Cataluña y España, sino entre Cataluña y Cataluña, partiendo en dos la abstracción de la sociedad y la concreción de la familia. No sé si la tuya, pero es muy probable que sí.

Recapacita, amigo soberanista. Está muy bien creer en la independencia y reclamarla en el Camp Nou cuando Messi desempolva la escuadra, pero conseguirla de cualquier manera, con la bendición de Otegi, con la extorsión de la CUP, con la manipulación de los sentimientos y la insumisión a las leyes, no digo que te desengañe, pero es probable que te haga pensar.