Fernando Ónega: "Agotar la Legislatura sin Presupuestos sería un desastre a todos los efectos"
Primero hay que ver si las enmiendas a la totalidad se mantienen, porque igual que se presentan se pueden retirar.
Y, aunque no se retiren, pueden ser derrotadas, con lo cual el debate presupuestario puede continuar y en un debate largo todo acuerdo es posible. Es posible, incluso, que los independentistas entren en razón, sopesen el dinero que Cataluña se lleva en transferencias e inversiones –hablamos de 4.000 millones de euros--, y no veo yo a la Generalitat renunciando a ese dinero, si a Torra y compañía les queda algo de responsabilidad.
Algo parecido se puede decir de Podemos, aunque su intención sea distinta. O sea, que yo no doy por tumbados los Presupuestos todavía. Ahora bien, si al final se mantiene el rechazo, los plazos de Sánchez se agotan. No tiene sentido agotar la Legislatura, por muchos decretos que se redacten y se aprueben.
Dicho de otra forma: no tiene sentido gobernar desde la agonía, aunque Sánchez ha demostrado que lo puede hacer y quienes lo sostienen lo prefieren a él antes que a la derecha. Los Presupuestos se pueden prorrogar un año, de hecho ahora mismo están prorrogados, pero no dos años. Agotar la Legislatura sin Presupuestos sería un desastre a todos los efectos. Incluso legales.
Si todo falla, la hoja de ruta conduce a elecciones generales, solo pendientes de la fecha. Ya no pueden ser en marzo, no es recomendable el superdomingo, queda por delante el horizonte del otoño. Entramos en tiempo de descuento.