Dijeron ayer los de Puigdemont que facilitar la formación de gobierno no sale gratis. Que la presidencia del Govern se compra, para entendernos. La tosquedad de la confesión no impide que sea verdad. Todo pacto de gobierno tiene algo de mercado. Es decir, tiene un precio.
Lo que me planteas, el apoyo de Illa y el PSC a Aragonés y Esquerra para que pueda gobernar en solitario o en compañía de otros tiene que ser a cambio de algo: o coalición con reparto de poder o renuncia de Esquerra a su hoja de ruta para la independencia. ¿Va a compartir poder Esquerra con un partido constitucionalista? No lo acabo de ver. ¿Va a renunciar Esquerra a su programa soberanista, al referéndum y a todo eso? Lo veo menos todavía. ¿Y va a respaldar el PSC un ideario que busca la ruptura del Estado español? Si lo hiciese, Pedro Sánchez, que es el padrino de Salvador Illa, se podría olvidar de ganar las próximas elecciones generales y todas las que vengan detrás.
Con lo cual, mi respuesta a tu pregunta, Alsina, es negativa: el PSC no debe facilitar el gobierno de Esquerra, si es para que Esquerra cumpla su programa por la independencia. Evitar que se repitan las elecciones puede ser un argumento interesante, pero pequeño al lado de todo lo que se juega en Cataluña con mentalidad de Estado. Y además, seamos realistas y mirémoslo al revés: ¿le daría Esquerra su apoyo a Illa para evitar las urnas? Ahí no hay nada que especular: ya se le ha dicho que no. Pues amor con amor se paga.