La moderación puede ser entendida como debilidad. Y, por tanto, las cuatro palabras se quedan reducidas a una: firmeza. Ahora bien: ¿qué entendemos por firmeza? ¿El 155? Torra está haciendo méritos, pero a las 12 de la noche pidió el cese de la violencia. Los Mossos están funcionando correctamente y en el govern y el Parlament todavía no hay un acto delictivo que lo justifique.
¿El cese de Torra que reclama Ciudadanos? Solo se puede hacer con el 155. ¿Ley de Seguridad Nacional o estado de excepción? Son posibles, pero hay que pensar si medidas de ese tipo llevan a la insurrección. No creo en el diálogo que propugna Iglesias, porque con incendiarios no se dialoga. Soy partidario, de momento, de una buena actuación policial que identifique a los extremistas y los entreguen a la Justicia.
Y la templanza aconseja ser prudente. Lo que se haga, una vez hecho, ya no tendrá remedio. Y el peor enemigo de la independencia es que su reclamación se vuelva violenta. Hace sufrir, pero le quita adhesiones.