Madrid | (Publicado 14.05.2019 07:18 )
Y digo espectáculo porque será un poco de coña ver un debate donde un participante está en la cárcel, otro en Bruselas y puede haber un tercero que, al grito de "yo quiero ser como Junqueras" se apunta y pone en un brete a la Junta Electoral. Ese tercero esPuigdemont, que además de ser un fugado, se dedica a destrozar la imagen de la Justicia española, de la democracia española y sus instituciones y trabaja por romper la unidad nacional.
Ver que tiene sus derechos políticos intactos escandaliza a multitud de ciudadanos. Si esta noche le vemos utilizando un medio público como es TV3 para llevar al Parlamento Europeo su mensaje destructor, provocará irritación o cachondeo. A ningún otro fugado o procesado se le permitiría ese ofensivo privilegio.
Tengo la impresión de que los jueces no quieren líos ni impugnaciones. Pero la imagen del debate y sus participantes es el retrato bastante fiel de la Cataluña política: uno en la cárcel, dos fugados, los tres con cuentas pendientes, y todos aspirando a la dignidad de representar el pueblo catalán. Garantista o excesivamente garantista, España es así.