Rafa Latorre reflexiona en Más de uno sobre el estado de alarma, en torno al que dice que hay dos posiciones. Recuerda que una dice que si hay que limitar derechos fundamentales es mejor hacerlo mediante la excepcionalidad y no mediante una ley ordinaria, mientras que la otra es que ya que la excepcionalidad se ha convertido en ordinaria, lo mejor sería convertirla en ley. "Ambas son discutibles y ambas son defendibles", comenta Latorre. El problema, dice, está en que el Gobierno pretende manejar el estado de alarma "como si fuera una ley ordinaria" y asegura que esto no es puede hacer. "El estado de alarma es un mecanismo perfectamente constitucional que ha de estar controlado periódicamente por el parlamento", explica. Sin embargo, recuerda que si España lleva medio año en estado de alarma, seis meses sin necesidad de aprobar prórrogas, es porque "Sánchez no quería pasar por el gorro periódico de someterse al dictado del Parlamento".
Recuerda la pregunta del diputado del PNV Aitor Esteban, que decía que "a qué hay tanta prisa, que por qué anticipar lo que va ocurrir en mayo". "Sánchez no está pensando en cuál será el escenario pandémico, sino en cuál será el escenario político", afirma. En los albores de mayo, con las elecciones en Madrid, reitera Latorre que "Sánchez no va a ponerse a negociar apoyos parlamentarios para sacar adelante una prórroga de la alarma", aunque tampoco hay una ley ordinaria que sirva la alternativa para las comunidades, que serán "víctimas de la debilidad parlamentario del gobierno y de su desidia negociadora".
Concluye recordando la portada de La Razón, que abre diciendo que hace seis meses que Sánchez no se reúne con las comunidades. "No seis meses cualesquiera, estos seis meses de olas pandémicas, cuya responsabilidad les atribuyó en solitario", señala.