VIVA EL VINO

Raúl del Pozo: "Para la nueva izquierda pija y woke el toreo es un residuo de la Inquisición"

Raúl del Pozo realiza en 'Más de uno' una defensa de la tauromaquia defendiendo que el toreo, además de arte y épica, es el último oficio en el que los españoles se ganan la vida con la espada.

Raúl del Pozo

Madrid |

Hay un proverbio que dice a las putas y toreros a la vejez os espero. No hay que esperar tanto porque las dos profesiones están condenadas al paro, aunque sea imposible.

El escándalo empezó cuando el ministro de cultura -Ernest Urtasun- suspendió el Premio Nacional de Tauromaquia. Para la nueva izquierda pija y woke el toreo es un residuo de la Inquisición y el Museo del Prado el símbolo del colonialismo. Para la historia el toreo es el último oficio en el que los españoles se ganan la vida con la espada. Es arte y épica.

José Luis Lozano, torero, ganadero, durante muchos años, empresario de las Ventas, ha sentenciado al ministro llamándole irresponsable y le han quitado las competencias de la tauromaquia. Escribió Ortega que quien no comprenda las corridas no comprende España. La fiesta es un espectáculo teatral donde se muere de verdad. Los españoles vendían la camisa para ir a la plaza.

Emiliano García-Page ha dicho que esa es la gauche divina que no llega al 5%. Y ha creado nuevos premios taurinos. Feijóo ha anunciado que asistirá a una corrida de San Isidro para defender la libertad cultural.

Pero crece la mayoría que considera que el toreo no es cultura, sino tortura. Las corridas de toros están prohibidas en Cataluña, en Canarias y en algunos países de América, aunque en Francia crece la afición. En todas las épocas el toreo sufrió las prohibiciones de reyes, papas, republicanos y anarquistas. No saben los republicanos que Las Ventas, la inauguró un presidente de la República, asesorado por Guerrita y Bombita.

Querido Carlos, el vino y el toro forman parte de la historia de las civilizaciones. Viva la gente que los cría y la tierra que los cultiva. ¡Y viva el vino!