Ha empezado la campaña de las europeas y Pedro Sánchez nos avisa del auge de la Internacional ultraderechista cuando le abandonan sus cómplices y ha tenido que retirar la ley del suelo, para no sufrir otra derrota 48 horas después de su fracaso en la abolición de la prostitución.
Sin Presupuestos, sin aliados, con la derrota en las elecciones europeas según las encuestas, el futuro de su Ejecutivo es incierto a pesar de su coraje y determinación.. El CIS anuncia que ganará el PSOE por 5 puntos, pero Feijóo le da el primer aviso: "Si el PP gana las Europeas, la legislatura quedará en suspenso". El líder de la oposición cree que el adelanto electoral es inminente.
Sánchez asegura que luchará contra la máquina del fango y que seguirá al frente del Gobierno los 3 años de legislatura. Alguien le debería recordar la sentencia de Guerrita: "Lo que no puede ser no puede ser y además es imposible". Ione Belarra lo ha resumido así "Hoy hemos tumbado la ley del suelo".
El sanchismo multa a Lambán con 600 euros por ausentarse en el Senado en la votación de la amnistía y Lambán te dijo a tí: "Sánchez ha desnaturalizado el proyecto del PSOE". Felipe González ha sentenciado: "Sancionar a Lambán es sancionarme a mí". Y en el Hormiguero con la Constitución en la mano habló de la voladura del Estado de derecho.
Diagnóstico: El gobierno está medio roto. Sánchez en vez de disolver las cámaras se dedica a ser oposición de la oposición. No le apoya ya parte de su Gobierno, ni los refundadores de su partido. Ha perdido la mayoría parlamentaria del Frankenstein y el Gobierno está sitiado.
Recordemos, querido Carlos, que necesitamos alegría en una botella contra la crispación y cisco que se acerca y digamos siempre: ¡Viva el vino!
