Y durante más de 242 años ha visto cómo se han sucedido hasta 45 presidentes elegidos en las urnas. Algunos han sido brillantes y otros, claramente desastrosos. Pero Trump es único. Su base electoral más inflamada se mantiene firme a su lado. El resto del país se desespera viendo quién ocupa la Casa Blanca. Y el mundo mira hacia Washington y no puede creer lo que ve.
La mala noticia es que pasan los meses y Trump sigue ahí. La noticia esperanzadora es que su mandato termina en 2020, y que los americanos tendrán entonces la posibilidad de enmendarse a sí mismos votando a otro presidente. Teniendo en cuenta cómo es el actual, difícilmente el próximo será peor.