Y así lo hicieron, organizaron un torneo 3x3 que resultó ser todo un éxito. Pero, además, se dieron cuenta de que se lo había pasado en grande organizándolo. Al año siguiente Javi decidió repetir la experiencia y darle un giro solidario y así es como nació Playing. A él se le sumaron otros amigos, que también tenían ganas de colaborar con distintas causas a través de su pasión, el baloncesto.
Poco a poco se han ido haciendo un poco más mayores y mucho más comprometidos. Ahora son más de 40 los jóvenes involucrados en el proyecto. Al ver que Playing iba creciendo, el año pasado ganaron un premio por su proyecto socioeducativo, decidieron apostar por un proyecto propio en el que invertir a largo plazo y, como buenos estudiantes, pusieron el foco en la educación.
Tras un trabajo exhaustivo de documentación pensaron que Gambia sería el lugar adecuado. Llevan meses preparando un viaje exploratorio que les llevará a recorrer, durante sus vacaciones de verano, seis ciudades del país africano para averiguar dónde poner en marcha un proyecto educativo, piensan en un colegio, pero quieren esperar a esperar a estar allí para decidir qué se necesita verdaderamente de ellos.