Roberto Brasero veranea en Novales,Cantabria, un pueblo al que llegó por la fiesta de los limones. En ese rinconcito de Cantabria se cultivan limones de gran tamaño y un riquísimo olor a orillas del Cantábrico, algo muy peculiar.
En Novales, que pertenece al municipio de Alfoz de Lloredo, la mayoría de las casas tienen limoneros y, según se dice, el que no lo tiene es porque es forastero. Una de sus vecinas es Maite Mirones, que vive feliz en ese pueblo. Desde las ventanas de su casa ve mucha naturaleza verde y, sobre todo los cítricos: limoneros, naranjos y mandarinos.
Limoneros desde la época de Felipe II
Los datos confirman que en la zona hay limoneros desde la época de Felipe II, cuando la piel de los limones se utilizaba como obsequio, explica en 'Más de uno' Maite, que tiene alrededor de cien limoneros que dan limones durante todo el año. Por ello, esta variedad se llama "cuatro estaciones".
Antiguamente los vecinos llevaban los limones a los mercados próximos para venderlos. Además, hacían agua de limón con azúcar para regalar.
Los limones auténticos de Novales, una variedad única
Enrique -'Quique'- Bretones, alcalde de Novales, hace limoncelo con los limones nos habla de los originales limones 'mano de Buda', que se utilizan mucho para cocinar porque es muy oloroso. En Novales tienen también caviar de limón, unos huevos de limón que se utilizan en coctelería y gastronomía.
Sobre todo, "lo que nos caracteriza son nuestros limones, que son una variedad en sí misma que se da durante todo el año y, gracias a la polinización de distintos árboles, ha conseguido sacar este limón auténtico de Novales", cuenta Quique mientras habla de la gran variedad de usos que se les puede dar.
Receta de puré de albedo
De los limones se aprovecha todo, como con el cerdo. Con la pulpa del limón, la parte blanca que hay entre la corteza y la fruta, hacen un puré de albedo.
Tras cocer y blanquear el albedo varias veces, se pone en almíbar con medio jugo de limón durante 24 horas. Una vez pasado el tiempo, se echa nata líquida y se bate. Esto se puede comer con unas rabas de calamar, como si fuese un tipo de alioli.
El mejor queso de Cantabria
Por último, charlamos con Alejandro, abad del Monasterio de Cóbreces, de 90 años. Su monasterio recibió el año pasado el premio al mejor queso de Cantabria. La leche para hacer el queso la reciben de la cooperativa de Comillas, por lo que "todo queda dentro de la comarca", cuenta.
Se pasteuriza la leche, se le añade el cultivo y el cuajo final. Cada vez hacen 4.300 litros de leche, unos 450 kg de queso. Después, se mete en los moldes, en las prensas y, por último, se lleva a las bodegas.