El 2022 no ha sido un año fácil como por otra parte era de esperar, pero al menos no ha sido como los dos anteriores.
Al Covid lo degradaron a gripe común, pero poco.
Se inauguró la primera Mascarilla Fashion Week de la historia.
Filomena se quedó en Filo.
La luz dejó de subir aunque se haya quedado colgada en las alturas.
El paro mantuvo su tendencia a la baja con el cuchillo entre los dientes de sierra.
Sanchez por fin accedió a concederle una entrevista a Carlos Alsina siempre que no hubiera preguntas. Alsina declinó la invitación.
La erupción del volcán en la playa de Denia no provocó tantos destrozos como el de La Palma, pero creó una fajana que ha unido la península con las Islas Pitusas, “la ruta del Vulcanao” le llaman.
El sector del turismo recuperó una parte muy importante de lo perdido y el ocio nocturno se reconvirtió en ocio diurno, los martes a mediodía.
El meteorito del tamaño de la bandera de Colón que se estrelló cerca de Fraga (Aragón) en agosto de 2022 separó definitivamente a Cataluña de España y ahora navega a la deriva por el Atlántico, el resto de España se entiende.
Basado en estudios realizados sobre el clítoris de las Delfinas se lanza al mercado el succionador Delfinfayer.
El congreso del PP madrileño lo ganó al final Djokovic por tres sets a cero.
Alberto Garzón publica su autobiografía bajo el título 'Rebelión en la Macrogranja'.
Antena 3 vuelve a dar la campanada, en la retransmisión de las doce uvas, con Alberto Chicote vestido con un traje hecho con la piel de Cristina Pedroche.
Y hasta aquí esta gilipollez.