El Informe sobre Condiciones de vida advierte de que la tasa de pobreza en 2014 se sitúa en el 22,2% frente al 20,4% del año anterior. Este porcentaje alcanza el 7% si hablamos de pobreza severa, es decir, 3.800.000 personas en España no pueden permitirse tener un teléfono, una lavadora o pagar los gastos del hogar.
Esta es la realidad que vive Aurelia de Cartagena, quien se considera una "zombie de la sociedad". Su marido y ella tienen un trabajo que no les permite llegar a fin de mes pero tampoco pueden acceder a ninguna ayuda o a la solidaridad de la gente ya que, afirma, solo hay "para los casos extremos".
Josefa de Valencia, nos cuenta que con su pensión tiene que mantener a sus hijos y nietos y a la vez cuidar de su marido en situación de dependencia. Su deseperación es tal que cuando se encontró a Rita Barberá por las calles de su ciudad no pudo evitar decirle que era "lo peor que le ha pasado a la Comunicdad Valenciana".
Escuchamos a otros muchos oyentes como José María de Ciudad Real, quien pese a haber sido concejal y diputado provincial del PP, dice sentir una "alegría tremenda" por la victoria de gente como Ada Colau. José María nos cuenta que "la maquina de este país de generar riqueza está gripada, no hay un autónomo que no esté en una lista de morosos" y achaca esta situación a las grandes multinacionales.
Por último, hemos hablado también con Carlos Susías, presidente de la Red Europea de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social, quien nos explica que esta situción es especialmente llamativa si tenemos en cuenta que incluso habiendo bajado el indicador de umbral de pobreza, los datos continúan empeorando. Lejos de mejorar, Susías advierte que de no tomarse las medidas adecuadas este problema podría volverse endémico en España