Recorrido de Carlos Alsina por el Panteón de Hombres Ilustres
En una nueva pirueta de gran destreza sonora Carlos Alsina conecta consigo mismo en el Panteón de los Hombres Ilustres donde las personalidades allí enterradas sugieren los nombres de mujeres que también debían estar allí, como Emilia Pardo Bazán, María Zambrano o Mariana Pineda.
En una nueva pirueta de gran destreza sonora Carlos Alsina conecta consigo mismo en el Panteón de los Hombres Ilustres y recorre las principales tumbas de las personalidades que allí se encuentran intercalando el relato ficcionado de los hechos históricos por los que se les recuerda.
Esos mismos hombres ilustres sugieren los nombres de mujeres ilustres que deberían compartir espacio allí con ellos, como Emilia Pardo Bazán, Mariana Pineda o María Zambrano, y que pasara a llamarse Panteón de Personas Ilustres.
Muy poca gente de Madrid lo conoce, es uno de esos sitios por los que muchos pasan a diario y no saben que aquí, entre el Paseo de Reina Victoria y la Avenida de la Ciudad de Barcelona, junto a la basílica de Atocha, hay un claustro donde están los sepulcros de por ejemplo Cánovas del Castillo, Práxedes Mateo Sagasta, la tumba de Eduardo Dato.
Con la ayuda de José Luis Sancho, investigador de los monumentos de Patrimonio Nacional, la arquitectura y los jardines de la Corona, Carlos Alsina recorre el panteón y nos acerca su historia.
La idea de este panteón nace en 1837, pero tardan como 32 años en empezar a hacerlo, y sería una bonita cuestión preguntarse por qué. Y ya lo empieza a hacer en el Sexenio revolucionario, año 69, se plantea, se empieza a materializar en otro lugar, y ya durante la regencia de María Cristina, se materializa aquí.
Elige este lugar y no otro porque este patronato era uno de los patronatos reales, era una iglesia muy importante desde el punto de vista de la Corte, desde el sigo XVI, y por tanto tenían lugar aquí ceremonias cortesanas y religiosas importantes. Por ejemplo matrimonios: en Atocha se casaron Isabel II y su hermana, y también se casó Alfonso XII las dos veces. Y por lo tanto para la reina regente, éste era el escenario de su boda.
El proyecto de la reina regente incluía la reedificación completa de la basílica, con un claustro, un campanario y el claustro estaba destinado desde el principio a Panteón de hombres ilustres. Se empezó por el claustro y por el campanario, y la iglesia nunca se llegó a acabar.