Este fin de semana el PSOE celebró el Congreso Federal del partido en Sevilla para elegir a la nueva Ejecutiva. El acto coincidió con una etapa complicada para los socialistas por los procedimientos judiciales abiertos a exministros y líderes del partido, algo que desde el Gobierno achacan a una maniobra orquestada por la derecha.
Críticas al hiperliderazgo de Sánchez dentro del PSOE
El hiperliderazgo de Pedro Sánchez ha sido visto por muchos de los líderes regionales como algo perjudicial para el partido, donde cada vez tiene menos peso la militancia.
Ayer, el diputado en las Cortes de Aragón por el PSOE, Ignacio Urquizu, criticaba en este programa, que ya no están presentes en el partido los elementos de transparencia, control y gestión que antes existían. Así, denunciaba que "los militantes tienen unos déficits democráticos" y pedía establecer límites al poder.
No hay debate ideológico entre los socialistas
En opinión de Carlos Alsina, el Congreso Federal fue más bien "una gala" porque el único elemento de noticia es quiénes son los agraciados con un puesto. En este sentido, no se esperaba ningún tipo de debate ideológico sobre los planteamientos del PSOE; "qué más da lo que decida el Congreso Federal del PSOE si luego se va a ir haciendo lo que en cada momento Sánchez entienda que se tiene que ir haciendo", critica.
Al final, "un partido en el que la posición política de cada momento la decide el secretario general sin necesidad de debate interno, tiene poco sentido que en un Congreso Federal se decidan decisiones políticas".
Ahora, muchos líderes regionales están esperando a ver qué pasa, teniendo en cuenta la fuerza que tiene el aparato del partido queriendo colocar candidatos. "Es muy difícil plantarle cara a una decisión tomada claramente desde Ferraz", sostiene Alsina, por mucho que se disimule con primarias.