Ponemos epílogo a una semana en la que se cumplía el 40 aniversario del fallido golpe de Estado del 23F. Algunos cuestionan el pedigrí de nuestra democracia, oportunidad para recordar como el anterior rey paraba la intentona, permitiendo con ello que hoy sigamos gozando de unas libertades que habilitan al separatismo a cuestionar este mismo régimen democrático. Algo que no tiene nada que ver con otras actividades del emérito que han socavado sus acciones.
Esta semana también ha traído la polémica sobre la celebración de las manifestaciones feministas el próximo 8 de marzo en plena pandemia. "Parece que algunos no entienden que la reivindicación en la calle por una causa, por justa que sea, no merece incrementar el número de infectados", sostiene.
