Minuto tecnológico: Que el algoritmo nos coja confesados
En los últimos meses estamos viendo los esfuerzos que hacen las tecnológicas para vender que están luchando contra la difusión de noticias falsas en sus plataformas. Facebook, Youtube, Twitter anuncian que crean equipos y medidas de prevención y seguridad para impedir la propagación, no solo de esas falsedades, sino de aquellas otras que ayudan a difundir mensajes yihadistas o terroristas. Pero a pesar de todo siguen y además multiplicadas por robots o perfiles falsos a los que tampoco parece que puedan controlar en tiempo.
ondacero.es
Madrid |
Y no solo eso, a veces noticias o vídeos de hechos terribles son recomendados por las propias plataformas. Ellas se defienden apelando a que no son decisiones humanas sino que la culpa es de los algoritmos que han creado con inteligencia artificial. Y si esto es verdad, pues nos están reconociendo que no controlan sus propios algoritmos. Asusta. Pero lo cierto es que en estas empresas viven de los ingresos publicitarios que les genera esos cada vez mas perfectos algoritmos. Es decir, parece que si los controlan para generar más clicks e incrementar sus ingresos comerciales aunque afirman que no pueden para otro tipo de mensajes. Pero no para todos, intenten publicar algo de alto contenido sexual en esas redes y en cuestión de segundos será detectado y borrado. En ese caso si funcionan rápido los mecanismos de control.
Puestos así la opción es, o no nos dicen toda la verdad o no controlan sus complejos algoritmos. ¿Hasta qué niveles de manipulación psicológica de los usuarios pueden llegar sin que haya medidas de control preventivos? Los algoritmos nos sugieren ahora todo: el viaje, la ropa, el hotel, el vídeo, la serie, la noticia y hasta el voto y las ideas. Tienen un poder terrible de persuasión.
Y mientras estas grandes plataformas siguen aumentando la inteligencia de algo que dicen que ya ni siquiera comprenden, que el algoritmo nos coja confesados