El abuso a la vejez es una realidad difícil de detectar. Miedo, vergüenza, culpa y pánico a la soledad son los pilares que sostienen el silencio de los ancianos maltratados. Una presa fácil por su debilidad física, emocional y económica. Claudican por el temor a represalias y a la ruptura de los afectos.
El cierre: El silencio de los ancianos maltratados
El abuso a la vejez es una realidad difícil de detectar. Miedo, vergüenza, culpa y pánico a la soledad son los pilares que sostienen el silencio de los ancianos maltratados. Una presa fácil por su debilidad física, emocional y económica. Claudican por el temor a represalias y a la ruptura de los afectos.