Pablo Casado anuncia que el PP se marcha de la calle Génova con lo que da por zanjada cuántas explicaciones le pidan de hipotecas pasadas. Es evidente para todo el mundo que no es una simple mudanza.
El presidente del PP rompe amarras con el lastre que suponen las palabras Gürtel, fianciación o Bárcenas. Y a partir de ahora, dice, dará las mismas explicaciones que e PSOE o Podemos cuando han tenido casos de corrupción o malos resultados electorales. Es decir, pocas o ninguna.