Ocho días han pasado ya desde que el Gobierno tildara de "extrema derecha" a los camioneros autónomos que reclamaban ayudas. Ocho días, desde que entonces les decía "extrema derecha", a considerarles hoy, la vicepresidenta Yolanda Díaz en concreto, los más vulnerables de la cadena y a los que más hay que proteger.
¿Qué ha pasado en esta semana que propicie tal cambio de consideración? Pues tres cosas determinantes:
- La primera: Que esos supuestos minoritarios han logrado paralizar un país y la fuerza de sus exigencias, o de las de cualquiera, se mide por lo imprescindible que seas para el sistema.
- La segunda: Que la otra vez que se paralizó España fue con una huelga de controladores que obligó al Gobierno a decretar un estado de alarma y Sánchez debe pensar que él ya ha declarado demasiados.
- La tercera: Que la calle se le ha ido de las manos al Gobierno, y eso siempre se paga en las urnas.