Extremadura está abocada a otras elecciones autonómicas tras fracasar el acuerdo entre PP y Vox. Y no le atemoriza a la candidata popular María Guardiola que ha sido tajante: gobernar a cualquier precio no. Coaliciones para mantenerme en el poder a costa de lo que sea no. Que me obliguen a condiciones imposibles desde una fuerza política que tiene menos representación en las urnas, no.
Acuerdo fracasado que certifica que los acuerdos entre el partido de Feijóo y el de Abascal ni son mandamientos ni son de obligado cumplimiento. Por más que otras fuerzas se empeñen en decir que los dos partidos forman un tándem indisoluble.