Mónica Oltra sigue siendo vicepresidenta del gobierno valenciano porque Ximo Puig quiere. El presidente valenciano ha elegido la estabilidad de su gobierno antes que mandar a casa a una política imputada por un asunto de presuntos abusos a una menor.
El PSOE, que pretende abanderar la lucha por los derechos de la mujer. se pone de perfil cuando le afecta. Seguro que alguna de las ministras del gobierno le hace llegar el mensaje a Puig de que mantener a Oltra es intolerable.
La coherencia es difícil pero no mantenerla pasa factura. Lo han comprobado en Andalucía donde ahora Juanma Moreno gobernará cuatro años más. Esta mañana le ha dicho a los suyos que no se confíen pero augura que la llegada de Núñez Feijoo a Moncloa está más cerca.