Durante 4 años, entre el 2005 y el 2009 esta era la voz que ustedes escuchaban cada día a esta hora en este informativo. La de Juan Pablo Colmenarejo que fallecía ayer a los 54 años. Muy pronto, cruelmente pronto. Los que fuimos sus compañeros durante años compartimos el dolor de su familia y aún doloridos seguimos adelante con el oficio que era el suyo... el que tanto amó y disfrutó.
Hoy es la jornada en la que un ex agente de la KGB con ínfulas de ZAR ha decidido dar otro paso para hacer efectivo su sueño eterno. El de recomponer la gran Rusia. Y para él Ucrania es una parte esencial.
Por eso, ni soberanías nacionales, ni leyes internacionales, ni sanciones, frenan los delirios de un ultranacionacionalista megalómano que está dispuesto a poner en jaque la economía y la paz mundiales. Para él, el fin justifica los medios. Lo ha demostrado con envenenamientos y ciberataques. Nuestro problema es que está al frente de uno de los países más poderosos del planeta.