Hamás no es el pueblo palestino. Hamás es una organización terrorista que reniega de la Autoridad Nacional Palestina por blanda. Y que tiene como objetivo aniquilar a Israel.
Hamás no es la causa palestina aunque sea la autoridad política y social en la franja de Gaza donde ha encontrado clientela entre la desesperación de la miseria. Hamás ha crecido al calor de extremismos como el de Netanyahu, un primer ministro que ha presionado y provocado a los palestinos siempre que ha podido.
Pero eso no justifica el terrorismo de Hamás que esta mañana, todavía, algunos partidos en España se niegan a condenar. No sabemos qué parte de que Hamás no defiende ni los derechos humanos, ni el progreso de la mujer, ni la democracia no han entendido esos partidos o políticos. En Europa lo tienen claro. Y esta mañana Francia, Italia, Reino Unido e Italia junto a Estados Unidos han firmado una carta de condena en la que no hay lugar a la equidistancia.