Pedro Sánchez sostiene en la sesión de control que está convencido de que esta semana habrá acuerdo con los transportistas que demandan una bajada en el precio de los carburantes. Ojipláticos nos quedamos, que es un término que ya está recogido por la RAE. Este es el mismo presidente que nos martillea desde hace días con que no piensa mover un dedo hasta que se publique el decreto del día 29, es decir, hasta la próxima semana.
¿Está rectificando Sánchez o simplemente trata de calmar las calles trasladando, no una promesa, sino una impresión personal?
El gobierno sabe que la situación se le escapa y sigue dando palos de ciego. Qué sincero ha sido Gabriel Rufián cuando ha dicho que a esta izquierda no la entiende nadie. Tan sincero como oportunista. Por cierto, también estaba previsto que Sánchez dejara para la semana que viene hablar del Sáhara. Y sin embargo ha elegido hoy con la calle cada vez más caliente para pronunciarse.