Es un fraude de ley según el Supremo y por tanto se acabó la estratagema que pretendía hacer a los independentistas distintos ante la ley.
Pablo Iglesias, auto investido látigo de la corrupción va a tener que explicar, ahora si, cómo y por qué su productora recibió 9 millones de euros de Irán.
Los primeros dirán que el estado opresor les machaca. El segundo que el estado opresor y de las cloacas le machaca. Mismos argumentos en boca de quienes piensan que la parte ancha del embudo es para ellos y la estrecha para los demás.