Los pobres son más vulnerables a la desgracia porque sus casas también lo son
Más de 3.700 muertos por el terremoto de Nepal. La cifra es espantosa y está envuelta en el miedo de los supervivientes por las continuas réplicas. Desgraciadamente habrá más fallecidos y sólo sentiremos algún alivio fugaz cuando se recupere algún superviviente entre los escombros. La desgracia no elige a los pobres. Es que ellos son más vulnerables porque sus casas también lo son.