Tamara Falcó volvió a ocupar titulares esta semana debido a unas polémicas declaraciones que realizó en el ultraconservador Congreso Mundial de Las Familias celebrado en México. La marquesa de Griñón aseguró: "Ahora estamos viviendo un momento muy complicado para la humanidad, hay tantos tipos distintos de sexualidades, hay tantos sitios distintos donde puedes ejercer el mal que creo que en otras generaciones no era tan evidente y no estaba tan bien visto".
Automáticamente, empezó a ser objeto de numerosas críticas por parte de personas que la acusaban de homófoba, por lo que pidió perdón al respecto.
Este sábado, Boris Izaguirre ha reflexionado sobre el asunto en Por fin no es lunes y ha pedido que se la aleje de "ese discurso odioso de los ultracatólicos que la rodean. Ella está muy interesada en alejar ese sambenito de que sea homófoba, que no lo es, pero el discurso que la rodea sí lo es. Por tanto, hay que alejarla de ese discurso que también quiere aprovecharse de ella".
