Como cada domingo en Por fin no es lunes cogemos nuestra Carretera Secundaria con Eva García para acercarnos a la España despoblada. ¿Cuántas veces hemos oído hablar de la España desconectada o de los pueblos sin conexión a internet? Es una realidad. La brecha digital persiste en la España rural en pleno siglo XXI. Pero hay un lugar al que hoy nos lleva nuestra Carretera Secundaria que tiene mejor internet que el que tú y yo tenemos en casa. ¿De qué lugar estamos hablando?
Hablamos de tres municipios (a los que ya se han sumado algunos más) del nordeste de Segovia. Tres municipios que no suman ni siquiera 180 habitantes: Castroserracín, Navares de las Cuevas y Cerezo de Abajo. Hasta hace muy poco tiempo, en estos pueblos conectarse a internet era una auténtica pesadilla.
Ni modem ni satélite ni red wifi. En la España rural el 21,7% de los habitantes no tiene conexión a internet. Hasta 5 millones de personas viven desconectadas, sin poder mandar un correo electrónico, hacer compras por internet, pedir una cita médica o teletrabajar. La falta de un internet de calidad explicaría el por qué los habitantes de las zonas rurales consultan un 8% menos las páginas web de los medios de comunicación, ven un 10% menos los vídeos online o escuchan un 12% menos la música en streaming.
La primera red abierta de 1GB rural de Castilla y León
Ahora en los pueblos del Nordeste de Segovia es posible tener internet, pero no cualquier internet, sino uno de alta velocidad. Emilio Utrilla, un ingeniero informático afincado en Castroserracín, harto de no tener una buena conexión a internet, se armó de paciencia y buscó una solución. Y la encontró en la fibra oscura. Junto a los vecinos de la zona, creó Nordesnet, una asociación sin ánimo de lucro establecida como un operador de telecomunicaciones para dar servicio de conexión mediante fibra óptica a los pueblos a los que no llegan los grandes operadores.
Su filosofía es lograr que los servicios demandados por los vecinos durante mucho tiempo dependan de ellos mismos. Por eso, han recurrido a las hacenderas digitales y entre todos han creado una infraestructura de uso común. Ahora disfrutan de mil megas simétricos por segundo a un bajo coste. ¿Quieres conocer más detalles?