El analista político Pablo Pombo dice en Por fin no es lunes que los lunes de enero son días ásperos. Está calculado. Pero el que será difícil de verdad será el próximo, el del día 16. La ciencia social considera que será el más triste del año, lo llaman el Blue Monday porque las navidades quedan atrás y la cuesta de enero se nota mucho.
Vamos a seguir notando la inflación bastante. Y más de una familia se va a sentir defraudada en el supermercado. Primero porque la propaganda con la bajada del IVA de los alimentos -que sufrimos a final de año- se pasó otra vez de frenada. Se crearon demasiadas expectativas y la bajada a la hora de pagar no se va a notar tanto como se nos vendió. A pesar de eso, hay que poner las cosas en su sitio. Las medidas pueden parecernos tardías e incompletas pero van en la buena dirección. Se dice que el ahorro es de unos tres euros por compra grande.
Y debemos subrayar que para muchas familias tres euros no es poco. Tres euros son un litro de leche, un kilo de arroz y un kilo de lentejas. Ahora bien, esta es una cuestión sobre la que se detiene Pablo Pombo: "un gobierno que se dice progresista tiene la obligación, casi moral, de bajar el IVA del pescado y de alimentación. Y de hacerlo además cuanto antes. ¿Por qué? Por una cuestión elemental, por los niños de nuestro país", dice Pombo.
