Judith González, la filóloga de cabecera de 'Por fin no es lunes', ha querido en su sección 'Dímelo bien', hablarnos del léxico que emplea la juventud, la de ahora y la de antes.
Nos cuenta que el lenguaje de los jóvenes siempre es una fuente de riqueza y creatividad, está lleno de expresiones metonímicas, metafóricas y de contacto e influencia con otras lenguas. Hoy, además, que pasan tanto tiempo mirando las pantallas de sus teléfonos móviles, hay muchas expresiones que se toman de este ámbito digital o que proceden de acrónimos y abreviaturas más o menos lexicalizadas, casi siempre tomadas del inglés, y que se quedan en su idiolecto.
Esta misma de 'abro hilo', que procede de las redes o este apelativo que ahora se usa tanto, ese 'bro', acortamiento de 'brother', que se emplea para referirse a la otra persona y que curiosamente ha llegado a oír incluso entre chicas, aunque, como sabéis la traducción directa sería el masculino 'hermano'.
Desde 'tronco' al 'bro', efectivamente un apelativo diferenciador es un clásico. Luego los jóvenes siempre tienen en su arsenal algunos calificativos para ese otro. Para entendernos, no es que sea un repertorio lleno de sutilezas, ni que recoja un gran abanico de personalidades, pero, a grandes rasgos, sí que tenemos distintos arquetipos. 'Los máquinas', que diría David Bisbal, hoy son los 'admin', que procede del acortamiento de administrador y que conserva ese sentido de ser el jefe, quien manda o maneja la situación.
Se emplea también con ese sentido ser un 'pro', que está más a caballo entre varias generaciones. Hay también personalidades que no son exactamente el jefe o la jefa del meollo, pero por los que, aún así, nuestros adolescentes sienten una suerte de respeto. A estas, ahora, se las denomina BAE. En realidad, aquí donde la veis, esta sigla denota bastante cariño, su origen está en la expresión inglesa Befone anyone else, 'antes que nadie'. Así que ya sabéis que si sois el 'bae' de alguien, ahí os tiene en primera posición.