EL ÚLTIMO NIÑO DE RUSIA

Ángel Gutiérrez: "Creímos que se acabarían las guerras para siempre, pero no"

A finales de 1937 Ángel Gutiérrez fue embarcado en un buque junto a otros 800 menores que se dirigían a lo que parecía otro mundo. Hoy a sus 90 años, el último niño español de Rusia, guarda en la memoria cada recuerdo de esa inocencia.

ondacero.es

Madrid | 31.12.2022 10:30 (Publicado 31.12.2022 10:27)

Existe un relato escrito por Dostoyevski en el que un hombre cansado de sentirse ajeno a la sociedad ronda con la idea de quitarse la vida, pero cuando decide ponerlo en práctica se queda dormido y sueña con un mundo lleno de bondad en el que todos le querían. Cuando Ángel Gutiérrez descubrió aquella historia pensó: ‘’Es la historia de mi vida’’ .

La crueldad del mundo le hizo pasar de ser feliz en la montaña a embarcarse en un viaje en el que conoció el horror de la guerra. Ángel Gutiérrez se convirtió en un número junto a cientos de niños que, como él, tuvieron que marcharse a la fuerza, en barcos sucios, sin apenas comida y con la tristeza como compañera. Con seis años llegó a pensar que su vida había terminado, hasta que arribó en un lugar que parecía el paraíso.

El mismo lugar que hoy lidera un hombre capaz de invadir un país vecino, de revolver una guerra que lleva gestándose durante más de ocho años y cuya maldad no tiene límites. Rusia fue para Ángel Gutiérrez un refugio en paz, limpio y lujoso donde creyó, con la ingenuidad de un niño, que las guerras se acabarían para siempre.