Óscar nos cuenta que hay muchos intereses ocultos y poderosos detrás de las tortugas marinas, como el comercio ilegal con sus huevos y su carne, ya que existe la creencia de que los huevos de tortuga son afrodisíacos. A eso hay que sumar el hecho de que su carne es también muy apreciada y consumida en ciertas esferas como muestra de poder, ya que es una especie en peligro de extinción.
Él se dedicó en México a proteger los huevos de tortuga para que no acabasen con ellos, y por ello comenzó a estar amenazado por los narcos y tuvo que huír. Tras huir y pasar un tiempo en España con su mujer, intentaron volver a México y nuevamente tuvieron que salir huyendo de allí. "Comencé a trabajar como inspector federal de medio ambiente (el equivalente a SEPRONA), pero a los 5 meses de haber comenzado me vi obligado a renunciar y de nuevo tuvimos que volver deprisa y corriendo a España porque ya estaba amenazado de muerte por ‘gente de adentro’ y también me buscaba ‘gente de afuera’, todo por hacer bien mi trabajo” asegura.
¿Se puede hablar realmente de inteligencia vegetal?