Una medalla de oro al Mérito de las Bellas Artes en una especialidad un tanto especial. Una persona que transmite pasión por la vida y por el circo y esta pasión por el circo se la debe a su hermano mayor que, con su primer sueldo, decidió invitar a sus hermanos pequeños a conocer el mundo de los espectáculos ambulantes y donde Graziella ve por primera vez el Circo Atlas de los Hermanos Tonetti y decide que quiere formar parte de eso.
Y lo consigue porque empieza a trabajar nada más y nada menos que en el Circo Ruso de Ángel Cristo en los 80. A partir de ahí entra en esa vida ambulante de familias que viajan juntas en una furgoneta pequeñita y acampan donde se puede, el circo de entonces.
Historia del circo en España y el mundo
Graziella Galán es historia del circo en nuestro país y en el mundo. Tras una trayectoria de más de 60 años, que todavía sigue, acaba de recibir el reconocimiento a su carrera con la Medalla de Oro al Mérito de las Bellas Artes. El premio se le otorgó hace un par de años, pero lo ha recogido la semana pasada, ella y todos los galardonados de 2022.
Un premio y un reconocimiento que pensó que se trataba de una broma el día que la avisaron porque recuerda que se lo comunicaron justo el Día de los Inocentes, cuando empezó a recibir mensajes de felicitación y pensó que todo era una inocentada.
Reivindica que deje de mirarse el circo como al "hermanito menor" y se le empiece a dar la seriedad que merece como disciplina: "Es un poco triste que, a través de la historia el circo tuvo un plano muy importante en el mundo de la pintura y de la escritura" y ahora se hable de él "de manera un poco peyorativa".
La vida en el circo
Aunque reconoce que "todo se idealiza, a veces en el peor de los sentidos", la vida en el circo "era algo maravilloso" y se siente muy afortunada por haber vivido lo que ha vivido. Pero, asegura, que el circo del siglo XXI ya no tiene nada que ver con lo que fue: "Es otro concepto y ha evolucionado muchísimo. De las escuelas sale gente increíble y con unas propuestas maravillosas, pero me entristece que el mundo del circo en sí, ese de viajar todos juntos, está en peligro. Ahora la gente se reúne, hacen sus compañías, sus bolos y luego regresan a sus casas".
