''El cuarto de la plancha'' es un espacio que para Inma Chacón guarda muchos recuerdos. Conversaciones con su madre entre camisas y sábanas recién planchadas que ha querido dejar por escrito para hacerle un homenaje y retener su voz. Igual que retiene su mirada en un edificio, igual que el abrigo de su padre abrazaba a su madre, igual que una chaqueta roja de su gemela, Dulce Chacón, le seguía dando su calor.
La escritora, finalista del Premio Planeta en el año 2011 por ''Tiempo de arena'', ha contado en Por Fin No Es Lunes cómo era la unión con su hermana y cómo siguen siendo ''el uno y el dos''. También ha hablado del valor que tuvo su madre para marcharse del pueblo cuando se quedó viuda y cómo los objetos retienen el tiempo.