Isabel Coixet debutó como directora en el año 1989 con ‘’Demasiado viejo para morir joven’’. Hace casi veinte años recogía su primer premio Goya a Mejor Guion Adaptado por ‘’Mi vida sin mi’’ y años más tarde vendrían muchos más: cuatro Goyas por ‘’La vida secreta de las palabras’’, Goya a Mejor Documental por ‘’Invisibles’’, también Mejor Documental por ‘’Escuchando al juez Garzón’’, tres Premios Goya por ‘’La Librería’’, entre otros muchos reconocimientos, como el Premio Nacional de Cinematografía en 2020.
Desde muy pequeña ya sabía que quería contar historias y ahora asegura que esas historias ''nos ayudan a explicar el mundo'' y que ''al menos si lo explicamos no vamos a oscuras''. Los tambores de Calanda marcaron el ritmo de su pasión por rodar películas ''en ese momento veías a la gente con las manos despellejadas y la sangre en los tambores, me impresionó mucho''. Y su ritmo continua, de hecho, hasta nos ha cantado en directo.
En su última película, ''Un amor'', retrata la mezquindad humana y la complejidad que tenemos como seres imperfectos, ella misma asegura que le asusta la perfección y que no juzga a los personajes. También nos ha contado que en los rodajes encuentra el equilibrio ‘’la vida todavía no se como manejarla, sin embargo estoy en un plató de cine cualquiera y allí conozco la reglas, sé como hacerlo, eso es lo que me engancha’’.