Lluís Homar, actor y director de la Compañía Nacional de Teatro Clásico, recibió el lunes el Premio Max al mejor acto de año. Un premio del que está "muy contento" y que aprovecha para poner en valor la cultura y el teatro, sobre todo en esta época extraña marcada por la pandemia.
"Somos necesarios más que nunca, aunque todavía no se acaba de tener esa consciencia", opina en referencia a la importancia del mundo de la cultura en la sociedad, y añade que durante estos meses de cierre de teatros han tenido que reinvertarse y buscar otras alternativas.
El actor hace balance de lo acontecido y asegura que están "orgullosísimos". "Estamos contentos de ver que no nos rendimos y que estamos preparados", insiste, a la vez que señala que, a pesar de las circunstancias, el público está respondiendo bien y les da "muchas ganas de seguir adelante".
Por último, insiste en que "hay que adaptarse a las circunstancias" y es el teatro el que "tiene que ayuda a abrir ventanas". "Creo que más que nunca tenemos que ser", concluye.