En Por Fin No Es Lunes creemos que se puede estar a favor del progreso, con las inteligencias artificiales, y también defender los oficios ancestrales. Hablamos, entre otros, de la forja, del soplado del vidrio o de la cetrería. Tres profesiones que podrían desaparecer si no fuera por las personas que luchan por mantenerlas.
Es el caso de Rebeca Rego, que practica la cetrería, ese arte milenario de adiestrar aves para la caza de otros animales. También de Elena Laura Sánchez, soldadora de profesión y forjadora artesanal de oficio y de Alba Martín sopladora de vidrio en la Real Fabrica de Cristales de la Granja de San Ildelfonso. Con ellas nos hemos tomado el segundo café de la mañana y hemos descubierto qué tienen estos oficios para que ellas sigan manteniendo su práctica.
