Hace unas semanas se cumplió otro de los hitos científicos de nuestra era: el hallazgo de la secuencia del genoma humano completo. Códigos genéticos del que también forman parte ciertos comportamientos del ser humano, como por ejemplo, cómo nos comportamos o nuestra forma de ser. Han pasado 21 años desde la publicación de las primeras versiones del genoma humano y ahora que de la herencia genética podemos hablar.
De ciencia hablamos este sábado en Por fin no es lunes porque ya estamos conviviendo con el ser humano que llegará a vivir 130 años. Hablamos de una mirada que sí nos devuelve algo a esa herencia genética. La primera vez que el ser humano sintió tanta emoción como al completar el genoma humano fue cuando descubrió el genoma del ajolote (que redobla casi en diez veces al de los humanos), un ser extraordinario con el que convivimos y que atrapó a muchos literatos al mirarle a los ojos.
Qué es un ajolote, dónde vive y qué hace. Todas estas preguntas nos las responde el doctor e investigador del Instituto de Biología de la UNAM (Universidad Nacional Autónoma de México), Luiz Zambrano, única persona en todo el mundo que los protege y ha creado un refugio para ellos.
Pero, ¿qué es un ajolote? Es una salamandra más grande que las ya conocidas. De color negro u oscuro, tiene unas agallas como una corona que, al contrario que otros anfibios -que las absorben al convertirse en adultos- permanecen constantemente en ellos porque "el ajolote es el Peter Pan de los animales porque son siempre niños".